Iniciativa Yasuní-ITT: una apuesta ecuatoriana que marca un cambio de era
La Iniciativa Yasuní-ITT es una propuesta emblemática de Ecuador para el mundo, en tanto cuestiona la forma cómo está viviendo la sociedad contemporánea. “Es un baluarte en la transición hacia una estrategia de desarrollo que implica nuevas formas de producción y consumo, abandonando la dependencia de los productos primarios”, expresó Fander Falconí, secretario nacional de Planificación y Desarrollo, durante el Enlace Ciudadano transmitido este sábado.
El presidente de la República en funciones, Lenin Moreno, decidió resaltar la Iniciativa, grabando el Enlace desde la comunidad de Añangu, precisamente en el interior del Parque Nacional Yasuní.
Ante el problema del cambio climático, la Iniciativa Yasuní-ITT, que busca mantener 846 millones de barriles de petróleo bajo tierra a cambio del aporte económico de la comunidad internacional. Es una propuesta alternativa. “El consumo energético en el planeta y que nos está llevando a un callejón sin salida” aseguró Falconí. En cambio, la concreción de esta propuesta implicaría una transición hacia un modelo ligado a la sustentabilidad, a la utilización de energías limpias, y que los fondos recaudados sean un recurso para las comunidades locales y para la conservación efectiva del área del Parque Nacional Yasuní.
“En las cumbres de cambio climático los países ricos no llegan a un acuerdo vinculante para reducir sus emisiones de dióxido de carbono, por eso es tan importante que un país pequeño, marginal en el contexto mundial, haya sido capaz de lanzar una iniciativa global que hoy cuenta con reconocimiento internacional”, expresó Falconí.
“El Yasuní no sólo es un fragmento de bosque tropical con poblaciones humanas y con una enorme diversidad biológica, que se debe salvaguardar. Es una prueba de vida, es una apuesta por el planeta”, dijo.
Para el Secretario Nacional, la Iniciativa se viabiliza gracias a que el país tiene la Constitución más verde del planeta. Por primera vez se le otorga derechos a la naturaleza, lo cual está siendo tomado en cuenta por el constitucionalismo internacional, que pone a Ecuador como país de vanguardia en términos de derechos constitucionales. Mediante el marco de políticas establecidas en el Plan Nacional para el Buen Vivir, se garantiza la conservación del patrimonio y su uso sostenible.
La Iniciativa Yasuní-ITT evitará la emisión de 407 millones de toneladas de CO2 en la atmósfera, el principal gas que provoca el cambio climático, y preservará la enorme riqueza biológica del Parque Nacional Yasuní (considerada por la UNESCO como única en el mundo y por los científicos como el lugar más biodiverso del planeta), garantizando el respeto por las culturas indígenas de los pueblos en aislamiento voluntario que lo habitan.
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